El miedo y la incertidumbre son dos de los sentimientos que han acompañado la evolución de los seres humanos a lo largo de la historia.
El miedo tiene que ver con la angustia y la aprensión. La incertidumbre es reflejo de carencias de esos seres humanos que colonizaron el planeta: falta de seguridad, de conocimiento seguro y claro de algo, de certeza.
